Debajo de las bulliciosas calles de París – la Ciudad Luz – se encuentra un laberinto de túneles y cámaras que cuentan una historia oscura y misteriosa, me refiero a las Catacumbas de París (o simplemente “Les Catacombes”.

Las Catacumbas de París son el osario subterráneo más famoso del mundo, abarcando más de 300 kilómetros de pasillos laberínticos.
Hoy en día es un lugar donde realizar turismo si te interesa conocer el lado más oscuro de París, ¿estás preparado para un recorrido virtual por las catacumbas?
Las catacumbas de París por dentro
Pese a que estas catacumbas – y sus criptas – se extienden por gran parte de la ciudad, el circuito turístico solo tiene una longitud de 1.5 kilómetros.
El resto de las catacumbas es como un laberinto muy peligroso para ser transitado, razón por la que no se permite el acceso al público.
Un recorrido por las Catacumbas
A medida que descendemos por una estrecha escalera de caracol – y nos alejamos del París moderno – llegamos a un mundo que parece haberse detenido en el tiempo.
El aire es fresco y húmedo, las paredes están revestidas con piedra toscamente labrada y el único sonido es el eco de tus pasos.
Si bien el espacio al que podemos ingresar es poco en comparación a la extensión total de las catacumbas, se trata de un recorrido que no podemos dejar de realizar en nuestra ruta por París.
En este trayecto de poco más de 1 kilómetro de extensión nos toparemos con miles de huesos y calaveras agrupados en las paredes formado una imagen de lo más escalofriante.
El imperio de los muertos
A medida que te adentres en las catacumbas, te encontrarás con un portal de piedra inscrito con las palabras «Arrête, c’est ici l’empire de la mort» – «Alto, este es el imperio de los muertos».
Más allá de este punto, las paredes están revestidas con cráneos y fémures cuidadosamente apilados, un claro recordatorio del pasado de la ciudad.
Cada cámara está llena de huesos dispuestos en patrones intrincados, creando un cuadro macabro pero extrañamente hermoso 💀.
Las otras secciones de las catacumbas – no abiertas al público – tienen una apariencia similar así que no te pierdes de mucho.
El arte al interior las catacumbas
A pesar de carácter sombrío, las Catacumbas de París es posible encontrar algunas piezas de arte.
Un ejemplo notable es el «Barrière d’Enfer», un modelo detallado de una fortaleza tallada por un trabajador de cantera llamado Decure.
A ello se suman esculturas y tallados que fueron creados por los canteros previos al uso de estos túneles como osario y algunas adiciones que se realizaron durante los siglos posteriores.
También hay numerosas inscripciones y grafitis, algunos de los cuales datan de la Revolución Francesa.
La experiencia de visitar las catacumbas
La visita a las Catacumbas de París no es una aventura para todos los gustos.
Sus túneles angostos, los techos bajos y el silencio espeluznante pueden ser inquietantes para los más débiles de corazón.
Sin embargo, es una oportunidad única para explorar uno de los escenarios menos conocido de París y obtener una comprensión más profunda de su historia.
Las catacumbas son un testimonio de la resiliencia de la ciudad y su capacidad para adaptarse a las circunstancias cambiantes, incluso ante la muerte.
Otro punto a tener en cuenta es que se trata de un lugar bastante popular con miles de turistas que quieren conocer los misterios que guardan las catacumbas, especialmente durante la temporada alta.
Debido a ello te recomendado hacer la compra de una entrada sin colas en lugar de hacer la compra directamente en la boletería.
Galería de imágenes





Las catacumbas secretas de París
Además del recorrido turístico por las Catacumbas de París, hay otros ingresos secretos en diferentes partes de la ciudad.
Ello lo podemos ver en la película «Así en la Tierra como en el Infierno» (en francés, Les Catacombes) cuando un grupo de jóvenes se embarca en un viaje a través de las catacumbas de París en la búsqueda de la piedra filosofal.
Es importante recalcar que el ingreso a estos túneles está prohibido ya que así como quedan pocos ingresos conocidos hay muy pocas salidas.
Además muchos de estos pasillos han sufrido derrumbes.
La historia de las Catacumbas
Al principio las catacumbas de París no tenían esa función sino que servían como una cantera de donde se sacaba piedra caliza para la construcción de las edificaciones de la ciudad aproximadamente en el siglo XIV.
Para el año 1786, estando esta cantera abandonada, se decidió utilizarla para guardar los restos humanos del Cementerio de los Santos Inocentes (Cimetière des Saints-Innocents), el cual estaba sobreexplotado.
El resultado viene a ser la vasta red de túneles y cámaras que vemos hoy.
No hay un número exacto pero se estima que más de 6 millones de personas están enterradas en las Catacumbas de París.
Horario de atención
El horario de visita es de Martes a Domingos de 10:00 a 20:30 horas.
Los días lunes las catacumbas permanecen cerradas al público.
Precios
La entrada a las Catacumbas de París tiene un precio de 35€ e incluye audioguía e ingreso sin colas (según la franja horaria elegida).
Para asegurar tu cupo en la fecha de tu elección te recomiendo realizar tu reserva online.
Ubicación
El ingreso a las catacumbas es por 1 Av. du Colonel Henri Rol-Tanguy, distrito XIV, París
Cómo llegar
Para ir a las catacumbas se tienen las siguientes opciones de transporte público:
Mapa
¿Vale la pena visitar las Catacumbas de París?Opiniones
Las catacumbas de París son un lugar que contrasta con la hermosa de su ciudad, ese aspecto oscuro es el que hace que sea poco visitada en comparación a otras atracciones turísticas.
Sin embargo, vale la pena visitar este cementerio subterráneo para conocer parte de la historia de París. Quizás no sea el capítulo más placentero de la historia parisina pero es importante conocerla.
Además, está rodeado de misterio, por ejemplo en algunas películas y la cultura popular se cree que en ellas se encuentra la puerta al infierno.
Un aspecto negativo de este lugar es que está lejos de otras atracciones turísticas aunque es posible llegar caminando desde las catacumbas hacia el mirador de la Torre Montparnasse para luego tomar el metro hacia el centro de París.